Ciao ragazzi,
El filósofo griego Heráclito se iba a la plaza, se ponía en una esquina y decía: “Todo cambia, nada permanece”
Después, un poco más tarde, en la misma plaza, pero en otra esquina, llegaba Parménides, otro filósofo griego, que decía algo así como que “Hay algo que no cambia, y sí, permanece”.
Y así todo el día.
De trabajar, ni a palos.
Ellos iban a la plaza y decían esas cosas raras.
La gente pasaba, los escuchaba, algunos entendían y tomaban lo bueno de cada uno, otros los miraban como si fueran barcos en el bosque.
Lo loco es que los dos tenían razón, me parece.
Será que ya no hay de esas plazas…
A lo que voy:
Aquí tienes la guía definitiva para terminar definitivamente con lo definitivo, que te hará aumentar la alegría (mucho).
Si tienes una actividad, un negocio, o quieres tenerlo y que te vaya bien, pues esto es ley:
Todo cambia, todo el tiempo; pero a la vez hay algo que no cambia.
Lo que no cambia son estos pasajes:
1- Escribe una web de manera que tu cliente ideal sienta que le estás hablando a él.
2- Haz que se suscriba.
3- Mándale unos cuantos mails para empezar. Te sugiero de no usar plantillas ni otras sopitas de fideo (salvo no quieras parecerte a todos los demás, que también puedes)
4- Cuéntale a tu gente suscrita, cosas interesantes para ellos, conecta puntos que tienen en común. Esto es la hostia de divertido y rentable.
Ahora bien, o mal (depende);
lo que cambia constantemente es lo siguiente:
Es tu manera de conectar los puntos que tienen en común tu y tu gente.
Me refiero a la manera de contarlo, el “cómo”.
Te tienes que copiar a ti mismo pero sin repetirte.
Esto también es la hostia: no hay nada más divertido y rentable que copiarte a ti mismo sin repetirte.
Aumenta las ventas y la alegría.
Ya sabes: